Creo en las señales.

Creo en las «señales». Creo en la gente que aún teniéndolo todo en contra, lo vuelve a intentar. Creo en las personas que luchan por aquello en lo que creen. Creo en los que saben que el éxito, no consiste en cuánto posees, sino en cuantos ojos haces brillar con tu presencia.

Creo en las segundas oportunidades, si lo que está en juego merece la vida. Me fascina la gente valiente, los que se la juegan, aún a riesgo de perderlo todo. Los que tienen en su punto de locura, la bendita brújula que los guía por el mundo. Los que hacen de cada despertar, el resto de su vida.

Rosa Vidal Ross © Copyright 2016.

Momentos que lo cambian todo.

Hay momentos en los que una palabra, un silencio o una acción cambian para siempre el resto de tu vida. Con las mismas piedras que otros han dejado en tu camino construyes un puente que te permite cruzar al otro lado del rio, y una vez allí, entiendes que todo tiene un sentido y un porqué.

Hay instantes en los que sabes que las decisiones que otros toman, tienen sobre ti un inevitable efecto mariposa, y ello lejos de cortar tus alas te impulsa a volar más alto, más lejos y a disfrutar de un paisaje que nunca antes hubieras imaginado.

Hay razones que no entendemos y se escapan a nuestra lógica común, y son precisamente esas, las que van quitando anclas y permiten que nuestro viaje sea más ligero y fascinante.

Hay veces que tienes que escuchar sin miedo a tu corazón y seguirlo allá donde quiera que vaya, porque aún equivocándote, sabes que siempre es mejor elección emprender tu camino, que arrepentirte, de no haber escuchado lo que llevas cosido en tu alma.

Rosa Vidal Ross © Copyright 2016.

Si te quedas.

Si te quedas conmigo no te prometo ser la mujer que conociste al principio porque tengo la curiosa habilidad de cambiar de opinión continuamente y tomar decisiones hoy, que ayer creía imposibles.

Si te quedas y me miras mientras duermo no te prometo ser una mujer perfecta que nunca perderá los papeles, porque me descubriras a veces… caprichosa, testarura, impetuosa e insegura.

Si decides que viajemos juntos no firmaré ningún papel donde asegure que no me romperé en mil pedazos, aunque si estás cerca, nadie mejor que tú para volver a unirlos junto a mi.

Si deseas vivir conmigo no te prometo que no me perderé y dudaré de todo y de mi, aunque si me abrazas y me miras cada día como hoy lo haces, es posible que tu pecho se convierta en mi estación favorita.

Si me amas sólo te pido que no me regales cosas que se envuelven solas, porque el mejor regalo siempre serán tus manos desnudas. Si te quedas y al mirarme me descubres cada día, estaré ahí para ti, siempre; tal vez llegue tarde algún día, pero te aseguro…llegaré.

No me cambies, dejame que crezca, que alcance mis sueños y verás como brillan mis ojos al verte.Y no te rindas si algún día yo tiro la toalla, porque estoy segura que «lo nuestro» vale la pena.

Si me quieres, házlo hoy como si mañana no existiera. Y nunca olvides que antes que la mujer de tu vida, soy la mujer de mi vida.

Rosa Vidal Ross © Copyright 2016.15782502_10208088026905815_1868370893_n